
El Centro Oncológico Integral Canario, rinde tributo a Marie Curie y William Roentgen en los días de la Oncología Radioterápica y de la Radiología
El día 7 de noviembre se celebra el día de la Oncología Radioterápica y de la Física Médica y el día 8 el día de la Radiología.
El 8 de noviembre se celebra el día mundial de la radiología en honor al descubrimiento de los rayos X en 1895 por Roentgen. Y el 7 de noviembre se celebra el día mundial de la oncología radioterápica en honor al nacimiento de Maria Curie, descubridora del radio y del polonio.
Ambos recibieron el premio nobel de física (1901 y 1903 respectivamente), en el caso de Madame Curie también recibiría más tarde el de química (1911).
Este período fue muy importante para la humanidad por la enorme trascendencia que han tenido estos descubrimientos en el desarrollo de la medicina fundamentalmente. Hoy en día no se concibe el diagnóstico de las enfermedades sin técnicas de imagen ni tratamientos sin el uso de la radioterapia, por ejemplo, el del cáncer.
Ambos descubrimientos además están relacionados en el tiempo, pues Curie elige como tesis doctoral los trabajos del físico Becquerel que versaban sobre la propiedad de que las sales de uranio emitían unos rayos de naturaleza desconocida que precisamente eran los rayos X descubiertos por Roentgen (el matrimonio Curie compartirían el premio Nobel de Física con Becquerel).
Wilhelm Conrad Roentgen: El descubrimiento de los rayos X
“No había revelado nada a nadie sobre mi trabajo. Le dije a mi mujer que estaba haciendo algo que haría que la gente, cuando se enterara, dijera: ‘Röntgen ha perdido la cabeza’”, le contó a Ludwig Zehnder el 15 de enero de 1896.
Aun hoy, existe cierta incertidumbre sobre lo que sucedió exactamente el 8 de noviembre de 1895, la noche del descubrimiento. Como Roentgen dio instrucciones de quemar parte de sus pertenencias después de su muerte, para reconstruir los hechos se necesitó una minuciosa labor de detective. Lo cierto es que, por aquella época, muchos físicos estaban estudiando la naturaleza de los rayos catódicos, por lo que es probable que el investigador, mientras experimentaba con ellos, se percató accidentalmente de una misteriosa luminiscencia en un papel pintado con una sustancia fluorescente sensible a la luz (platino cianuro de bario), incluso cuando cubría el tubo de rayos catódicos con material opaco. Al accionar la producción de rayos, a pesar de estar cubierto el tubo, la cartulina se iluminaba. Utilizando una pantalla fluorescente con el fin de comprobarlo, se sorprendió al ver los huesos de su mano proyectados sobre la misma cuando activaba la producción de rayos catódicos.
Obtuvo, de tal modo, la primera radiografía de los dedos de su esposa en color claro sobre fondo negro. Röntgen se preguntó acerca de esos misteriosos rayos que penetran la materia, pero que se detienen ante los huesos. La conclusión fue que alguno de esos rayos, al desviarse por acción del potencial positivo del cátodo, chocaban con él y surgían un nuevo tipo de rayos, desconocidos hasta el momento. De ahí su nombre de rayos X, ya que la X es el símbolo algebraico en cualquier ecuación.

Foto 1. Radiografía de la mano de la esposa de Roentgen.
En 1896 publicó su trabajo sobre los rayos X que acababa de descubrir. Obtendría, por ello, el Premio Nobel de Física en 1902.
Marie Curie: El descubrimiento de la radiactividad espontánea
María Curie nació en Polonia el 7 de Noviembre de 1867, estudió clandestinamente (las mujeres tenían prohibido ser universitarias) en la Universidad Flotante de Varsovia y comenzó su formación científica allí. En 1891 pudo marcharse a seguir formándose a París, donde vivía una de sus hermanas. Tuvo que dar clases particulares para poder reunir dinero para sufragar sus gastos, ya que sus padres, aunque eran profesores, habían sufrido las consecuencias de la guerra en Polonia, por el imperio Ruso y se empobrecieron.
Con mucho esfuerzo consiguió licenciarse en Física y recibió en 1894 una beca para investigar las propiedades magnéticas de diversos aceros por encargo de la Sociedad para el Fomento de la Industria Nacional. En ese mismo año conoció a Pierre Curie que sería su marido y compañero de investigación.
Eligió como tema de tesis doctoral los trabajos del físico Becquerel, y utilizó una técnica que los hermanos Curie habían desarrollado previamente, el electrómetro. En 1898 los Curie publicaron un artículo que anunciaba la existencia de un elemento al que llamaron polonio (María era polaca) y en 1898 anunciaron la existencia de un segundo elemento que sería el radio y en esa investigación se acuñó el término de radiactividad.
Madame Curie sufrió falta de consideración por ser mujer y polaca y no contó con ayudas económicas para sus investigaciones, fue un camino cuesta arriba (vendió su medalla de oro del Nobel) trabajó en un cobertizo sin instalaciones, pero a pesar de todo hoy en día tenemos su legado del que nos beneficiamos todos los días.
Enlazando su relación, ahora sí con la radiología, es muy curioso su papel en la primera Guerra Mundial, ya sola y con sus dos hijas ya que su marido murió atropellado por un carruaje de caballos en 1906, jugó un papel muy importante en el diagnóstico de los hospitales de campaña ya que propuso el uso de la radiografía móvil cerca del frente para ayudar a los cirujanos del campo de batalla contando con placas radiográficas.
Adquirió equipos de rayos X, vehículos y generadores auxiliares y diseños de unidades móviles de radiografías que llamó ambulancias radiológicas. Se convirtió en la directora del Servicio de Radiología de la Cruz Roja francesa y creó el primer centro de Radiología militar de Francia, operativo a finales de 1914. Su hija Irene de 18 años y un médico militar de 18 años la ayudaron a dirigir veinte unidades móviles de radiografías y otras doscientas unidades radiológicas en los hospitales provisionales. Instruyó a otras mujeres como ayudantes. En 1916 fue una de las primeras mujeres en sacarse el carnet de conducir para poder manejar las unidades móviles.
Su vida incansable en la investigación y en la ciencia continuó sin desánimo, buscando financiación y viajó a Estados Unidos donde consiguió más apoyo del que había recibido en Europa.
A pesar de todo, aunque tarde, no le quedó otra a la sociedad de entonces que reconocer su valía y recibió nombramientos diversos como miembro de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética, de Rusia, de la Real Academia de Artes y Ciencias de los Países Bajos, de Suecia, de la Sociedad Filosófica Estadounidense, de la Academia Alemana de Ciencias naturales, miembro del Instituto Pasteur etc., además de los dos premios Nobel. Como curiosidad, el primero querían entregárselo sólo a su marido, y éste se negó a recibirlo si no se reconocía a su mujer.
Uso de las radiaciones en Medicina
El descubrimiento de Röntgen despertó enseguida un enorme interés en toda Europa, sobre todo entre los médicos, porque en adelante dispondrían de un medio de exploración del cuerpo humano, técnica que explotarían inmediatamente; pero también entre los físicos, intrigados por este nuevo fenómeno.
Desde entonces, el desarrollo de las radiografías como parte importante en los diagnósticos médicos fue bastante rápido. Al observar que con ellas las zonas duras o más densas del cuerpo aparecían de manera nítida en las fotografías, los traumatólogos de aquella época vieron posibilidades ilimitadas para mejorar su trabajo diario.

Foto 2. Primera radiografía de tórax datada en 1896.
Hoy en día los rayos X forman parte no sólo de procedimientos sanitarios, sino que están presentes en aeropuertos para la supervisión del equipaje, en la industria para la verificación de piezas, etc. Sus múltiples aplicaciones hacen la vida mas fácil a nuestra sociedad.
Desde el punto de vista médico, los avances en la radiología han llevado al uso de rayos X en casi la totalidad de especialidades médicas: neurología, neurocirugía, cirugía vascular, cardiología, urología, digestivo, radiología vascular intervencionista, reumatología, traumatología, cirugía torácica, etc.
La oncología radioterápica es una rama de la medicina clínica que utiliza la radiación ionizante, sola o en combinación con otras modalidades terapéuticas, para el tratamiento del cáncer y otras enfermedades no neoplásicas. Por tanto, el legado de Curie y Roentgen son primordiales en esta especialidad. Mas del 70% de los pacientes afectados de cáncer reciben radioterapia a lo largo de la evolución de su enfermedad. Además, el tratamiento a dosis ultra bajas de enfermedades no oncológicas como artrosis, tendinitis, bursitis, etc., indican el amplio campo de influencia que tiene el uso de la radioterapia.
En los tratamientos actuales, los aceleradores lineales emiten los mismos rayos X descubiertos por Roentgen o se realizan implantes de braquiterapia con isótopos radiactivos cuya precursora fue la física Marie Curie.
Foto 4. Implante de una próstata con braquiterapia de alta tasa de dosis utilizando el radioisótopo Iridio-192. Radiocirugía cerebral con acelerador lineal de Rayos X
Actualmente, los profesionales de la Física Médica tienen un papel muy relevante en la adecuada administración de los tratamientos de radioterapia (dosimetría) pero también en los controles de calidad necesarios para poder asegurar un uso seguro y eficiente de los equipos emisores de radiación (radioprotección) así como de los radioisótopos utilizados con fines terapéuticos o diagnóstico. Su campo de acción está definido dentro de los departamentos de radioterapia, medicina nuclear y radiodiagnóstico de todos los hospitales del mundo.